LA SENTENCIA DE LA BRUJA #leyendas #españa #paísvasco #orgullo #humildad
En el pueblo de Yurre, en Vizcaya, habitaba una señora muy rica y orgullosa, que jamás se había humillado ante nadie, considerándose la más importante del lugar y siendo feliz con que todos se doblegasen ante ella. Todos los domingos, lujosamente ataviada, acudía a la misa mayor y se colocaba con gran empaque en la sepultura de su familia, esperando que todo el pueblo la contemplase. Existía en aquella parroquia la costumbre de repartir durante la misa a todos los feligreses, pan bendito que el sacristán llevaba en un cesto, y recorriendo la iglesia, iba dando un pedacito de pan a cada uno de los fieles Pero ocurrió que un domingo. al repartir el pan, como de costumbre, a la señora se le cayó de la mano el pedacito; le pareció una humillación agacharse a recogerlo, lo dejó tirado en el suelo, quedando ella muy erguida hasta que salió, sin recogerlo. Aquella misma noche empezó a sentirse mala, y cada vez peor, sin que los médicos llamados a consulta pudieran diagnostic