LA LECHE DE HERA #leyenda #grecia #vialactea
Imagen de cathy CANIOT en Pixabay En aquellos tiempos en el Olimpo reinaba Zeus, el lanzador del rayo. Sentada a su derecha, Hera, su esposa, presidía con él los banquetes de los dioses, lanzando sobre él miradas intranquilas. Y es que a veces el gran Zeus le era infiel y prefería la compañía de las ninfas, e incluso de las simples mortales. Un día, Zeus oyó hablar de Alcmena. Era una mujer conocida por su belleza y virtud y era la esposa de Anfitrión, rey de Tebas. Aprovechando la ausencia de su esposo, que se había ido a la guerra, Zeus decidió seducir a Alcmena. Adquirió la apariencia de Anfitrión y la joven cayó en la trampa. Al amanecer, cuando el auténtico Anfitrión volvió al palacio, Alcmena comprendió el engaño. El niño que nacería sería el hijo de Zeus. El rey de los dioses, encantado con la aventura, anunció por todas partes el nacimiento de su hijo. Hera estaba furiosa. ¡Así que, una vez más, su divino esposo la había engañado! Loca de celos, juró matar al bebé.