ABRAHAM, PADRE ORIGINARIO DE ÁRABES Y JUDIOS #LEYENDA #HISTORIA #RELIGIÓN #fe #obediencia #tentación #HEBREO #canaan
Los relatos judaicos y árabes coinciden en que Abraham fue un profeta que predicó enérgicamente el monoteísmo. Cuando nació, lo escondieron en una cueva porque el entonces rey Nimrod, había sido advertido de que un niño nacido ese año lo destronaría. Nimrod decretó la muerte de todos los niños varones nacidos. El arcángel Gabriel cuidó a Abraham en la cueva.
A los 13 años, salió al exterior, consagrado a la veneración de Dios. Su constante lucha contra la idolatría hizo que se enfrentara a las autoridades y a su padre, y que destrozara los ídolos de este.
Las tradiciones judaica e islámica coinciden en que Nimrod, al final ordenó la construcción de un gran horno abrasador y amenazó a Abraham con arrojarlo a las llamas si no abjuraba. Abraham se negó y fue arrojado al horno, pero se salvó gracias a la intercesión de Dios.
Por orden divina, Abraham y su familia se trasladan a la tierra de Canaán. Abraham carece de heredero porque su mujer Sara, es estéril. Para remediarlo, ella le envía a su sirvienta, Agar, y de esa unión nace Ismael, padre del pueblo árabe. Sin embargo, Dios vuelve a intervenir y Sara concibe de forma milagrosa, dando a luz a Isaac, padre del pueblo hebreo.
Sin embargo, Sara empieza a tener miedo de la enemistad de Agar e Ismael hacia ella, de modo que le pide a Abraham que los expulse a ambos al desierto. Casi muertos de sed, Agar e Ismael son salvados por un ángel que los conduce hasta un pozo. Según la tradición islámica, se trata del pozo de Zamzam, que está situado en La Meca.
Como prueba de fe, Dios le exige a Abraham que sacrifique a Isaac. Abraham lleva al niño al monte Moriah y justo cuando está a punto de quitarle la vida, un ángel salva a Isaac y sacrifica en su lugar a un carnero.
Según la tradición judaica fue Sammael quien instigó esa intervención angelical y acusó a Abraham de una egoísta devoción por Dios. Es Dios quien decide poner a prueba a Abraham pidiéndole que le ofrezca a su amado hijo. Sammael convence a Abraham de que no sacrifique a Isaac y que haga que Isaac se rebele contra esa prueba.
Al ver que Abraham no quiere desobedecer a Dios, Sammael se venga diciéndole a Sara que Isaac ha sido brutalmente asesinado, y la mujer muere de pena y horror. Tras la muerte de Sara, Abraham se desposa con Agar.
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