LA SEGUNDA GENERACIÓN DE HÉROES GEMELOS: HUNAHPU Y XBALANQUE #MITOLOGIA #MAYA #LEYENDA #envidia #sol #luna

Imagen de DEZALB en Pixabay

Cuando los gemelos Hunahpu y Xbalanque nacieron, Xmucane los acogió en su familia, que incluía también a los primeros hijos de Hun Hunahpu: Un Mono y Un Artesano.

Al igual que su padre y su tío, Hunahpu y Xbalanque eran brillantes y audaces. Eran también expertos cazadores y tenían poderes mágicos. Su belleza y su inteligencia despertaron la envidia de sus hermanastros, quienes les robaban la comida e intentaban ocasionarles todo tipo de problemas.

Aunque un Mono y Un Artesano podían tener mal genio y ser perezosos, eran también muy artísticos y musicales. Finalmente, Hunahpu y Xbalanque se hartaron del tormento que les imponían sus hermanos; los atraparon en un árbol y los transformaron en monos.

LAS PENURIAS DE HUNAHPU Y XBALANQUE

Un día mientras cazaban, los Héroes Gemelos atraparon una rata. Estaban a punto de arrojarla a una hoguera cuando la rata les contó lo que les había ocurrido a su padre y a su tío en Xibalba. También les explicó lo que había pasado con el equipo de juego de pelota (que incluía cascos, cinturones, muñequeras, y rodilleras) y que estaba escondido en casa de su abuela.

A la segunda generación de gemelos les fascinaba el juego de pelota, como a Hun Hunahpu y Vucub Hunahpu, y decidieron que vengarían la muerte de su padre en cuanto les fuera posible.

Pronto el estrépito de su juego constante empezó a molestar a los señores de Xibalba, y éstos convocaron a los gemelos al inframundo.

Tal y como habían hecho antes que ellos su padre y su tío, los hermanos cruzaron los tres temidos ríos y, ya en el inframundo, les esperaban una serie de pruebas. Sobrevivieron con coraje a los peligros que les deparaban, una noche tras otra, en la Casa de la Penumbra, la Casa de la Cuchilla, la Casa del Jaguar, la Casa del Frío y la Casa del Fuego, burlando las oscuras trampas y las artimañas de los señores.

La última y más dura noche, debían pasarla en la Casa de los Murciélagos. El más fiero de los murciélagos decapitó a Hunahpu y, para añadir humillación al dolor, los señores obligaron a Xbalanque a jugar al pokatok con la cabeza de su hermano como pelota.

Xbalanque fue ingenioso. Encontró un conejo y lo hizo pasar por la pelota, y se apresuró a recuperar la cabeza de Hunahpu y a unirla al cuerpo de su hermano.

Después, los Héroes Gemelos, accedieron a sacrificarse en el fuego, pero varios días después emergieron del río como seres similares a peces. Viajaron por todo el inframundo, entreteniendo a las gentes con sus cánticos, sus danzas y su magia.

Al final fueron reclamados para actuar por encargo de los dos soberanos más poderosos de las penumbras, y se les ordenó que volvieran a sacrificarse. Los dos obedecieron y al instante retornaron a la vida. Los señores querían que los gemelos obraran magia con ellos, y éstos lo hicieron, pero no invirtieron el hechizo para devolver a la vida a los señores. Xibalba se redujo a una mera sombra de lo que había sido, y los victoriosos Héroes Gemelos, ascendieron a los cielos para acabar convirtiéndose en el sol y la luna