EL ANTIGUO Y LA ANCIANA #Leyenda #Pueblo #Iroques #creación

Imagen de Gerd Altmann en Pixabay

El Portador de la Tierra, el Antiguo, vivía en el mundo del cielo. En el centro de este mundo crecía un gran árbol lleno de flores y frutos que alimentaban a todos los que vivían allí. El Portador de la Tierra tomó a la Anciana como esposa y ella se quedó embarazada al respirar el aliento de su esposo, pero el Portador de la Tierra se volvió celoso y desconfiado y empezó a consumirse.

Soñó que la respuesta a sus problemas era arrancar el gran árbol y eso hizo, dejando un agujero en el suelo del mundo del cielo. El Portador de la Tierra le dijo a la Anciana que mirara por el agujero, y cuando esta se inclinó, la empujó por el. Mientras caía, recogía las semillas del árbol con una mano y su raíz con aroma a tabaco con la otra. La Anciana cayó al agua que todo lo cubría. Los patos la vieron caer y unieron sus alas para acogerla, la Gran Tortuga surgió de los infiernos y con la curva de su caparazón creó un lugar de descanso sobre el agua para ella.

Un ratón almizclero, se sumergió en el agua y recogió barro, que extendió por el caparazón de la Tortuga. Cuando en la superficie se empezó a expandir, la Anciana soltó las semillas y la raíz que llevaba en las manos. La tierra se llenó enseguida de plantas y de la raíz brotó un nuevo árbol.

La Anciana se construyó un refugio bajo el árbol y allí dio a luz a una hija, que más tarde se quedaría embarazada del Viento. La hija oyó dos voces en su interior que discutían sobre quien nacería primero. Una era suave y la otra fuerte y dura.

-Si no me dejas salir primero -dijo la segunda voz- saldré a la fuerza. Y el niño de la voz dura salió por la axila de su madre.

A la Anciana solo le quedó fuerza suficiente para dar a luz a su otro hijo, y después murió. Fue la primera en morir y en pasar de este mundo al mundo del cielo. El niño que nació de su axila se llamó Silex y su corazón era frío y duro. El otro niño, el Portador del Cielo, era tierno y cariñoso.

Cuando los niños crecieron, decidieron ampliar la isla de la Tortuga. Sílex creó las montañas y las colinas del oeste, mientras que el Portador del Cielo creó los valles y los prados del este.
-Las estás haciendo demasiado cómodas -dijo Sílex.

He hizo todo lo que pudo por estropear la nueva tierra. Incluso robó el sol y lo escondió en el sudoeste, y aunque el Portador del Cielo lo recuperó, Sílex había creado el invierno. El Portador del Cielo vio su propio reflejo en un estanque. Tomó un poco de arcilla y creó a seis pares de humanos a su imagen, los primeros hombres y mujeres de las seis naciones #iroquesas.

El Portador del Cielo enseñó a los humanos cómo vivir, pero por cada buen regalo que les hacía, Silex les daba uno malo, y así aparecieron las enfermedades y el mal en el mundo. Por ejemplo, cuando el Portador del Cielo creaba una planta curativa, Sílex creaba una venenosa. Al final, el Portador del Cielo retó y venció a Sílex y lo encerró en una cueva. El Portador del Cielo también desterró a otros enemigos de la humanidad, como el Torbellino, el Viento y la Bestia de Fuego. Creó las estrellas, el sol y la luna, y cuando acabó, siguió a su madre hasta el mundo del cielo.